Con la masa hacemos bolitas que espolvoreamos con azúcar y las ponemos en horno a temperatura media por unos 10 minutos.
Se dejan enfriar y se sirven cubiertas con azúcar glass (impalpable) o azúcar molido.
Esto es una golosina que nos llega desde ciudad Juárez y seguro que encantará a niños y no tan niños, y es que el nombre nunca fue tan bien aplicado a un alimento.