Agrega la cebolla, el pimentón rojo picado y las hojuelas de chile rojo (ají) seco.
Cocína esta mezcla y revuélvelos a fuego medio-alto durante 10 minutos o hasta que la cebolla esté tierna. Reserva.
Aparte escurre bien el atún, desmenúzalo y mezcla con el queso y el puré de papas en un recipiente grande. Agrega la mezcla de cebolla; mezcla todo bien. Déjalos enfriar completamente.
Divide la mezcla en unas trece porciones iguales y dale a cada una la forma de una croqueta alargada de aproximadamente 6 o 7 cm (tres o cuatro dedos).
Sumerge cada croqueta en el huevo ligeramente batido y pásala por el pan molido, dándole vuelta para cubrir por todos lados.
Vierte el aceite en una sartén grande. Caliéntalo a 195°C.
Ve echando las croquetas al aceite por grupos y cocínalas hasta que estén doradas por todas partes.
Retira las croquetas de la sartén; escúrrelas en toallas de papel.
Sírvelas calientes, tibias o incluso frías, siempre están ricas..